Olvidos bicentenarios, democratización y racismo 21 Jun 2021 Actualizado el 21 de Junio 2021 | 17:31 h “Casi doscientos años después, ese desprecio racista se revigoriza, con más virulencia aún”. Desde que José de San Martín proclamó la independencia en la Plaza de Armas de Lima hace doscientos años, se han ido borrando de la memoria de los peruanos una serie de acontecimientos a ella vinculados. Se olvidó, para empezar, que aquella plaza fue rebautizada como “Plaza Independencia”. Se olvidó que Lima, “la Ciudad de los Reyes del Perú”, pasó a ser “la Capital de los Libres”. Se olvidó que el Real Felipe se convirtió en la “Fortaleza Independencia”; que el pueblo de Magdalena, donde residieron los libertadores, paso a ser “El Pueblo de los Libres”. Y así, como si se tuviera miedo a ser libres, todo, o casi todo, revirtió a sus nombres coloniales. Hasta se olvidó lo más importante: que la independencia fue una revolución, de la que nació la república. No se trató de un mero cambio d